miércoles, 4 de diciembre de 2013

VII CARTAGENA TRAIL 2013

Como buen frikazo que soy, durante toda la semana he estado pendiente del parte meteorológico en la zona. Conforme se acerca la fecha se ha ido consolidando una previsión que hacía presagiar que esta carrera no iba a dejar indiferente a ninguno de los corredores que hemos acudido a la cita con la última carrera de la liga regional de carreras de montaña de Murcia.



Este año los de Cartagena nos han ofrecido un recorrido inédito que, desde mi punto de vista, ha mejorado mucho el trazado de los dos últimos años. Y mira que el antiguo recorrido era muy bueno. Trazado muy técnico que unido a la lluvia, frío y fuerte viento le ha dado a la prueba una personalidad única, diferente a lo que nos tienen acostumbrados en el resto de pruebas de la Región. Es inevitable, por lo menos en mi caso, la previsualizacion mental durante los días anteriores a un evento deportivo de como va a ser la carrera y como voy a sentirme durante la misma. No suelo fallar. En el caso que nos ocupa me he quedado corto. Ambiente montañero brutal y sensaciones de ir puteado al máximo, pero dándolo todo durante la carrera.




No voy a entrar en demasiados detalles referentes a la carrera. Podemos decir que consta de 2 grandes subidas con sus correspondientes bajadas. Del mismo modo mi carrera podría resumirse en 2 partes:

La primera parte abarca desde la salida hasta la llegada a El Portús. En los primeros compases del recorrido me siento algo espeso. No voy suelto y los cuádriceps y gemelos los siento duros como piedras. Me uno a un grupo de cuyos integrantes creo que únicamente conozco a  Joaquín Cárceles, que es el que va marcando un ritmo que a duras penas puedo seguir. Primer avituallamiento y me lo salto. No quiero perder al grupo en el que voy. Una vez llegados al castillo empieza la bajada. Bajada muy peligrosa debido a la lluvia y el barro. Me pego algunas "guascas" pero uno ya está acostumbrado. Con esto de la crisis voy últimamente con unas zapatillas que dan pena. Hay algunos corredores que me adelantan bajando cual Heidi dando saltos por el prado. Es increíble qué seguridad llevan. Quién pudiera...

A duras penas logro aguantar el ritmo del grupillo hasta El Portús. De hecho llegando al pueblo me quedo solo. Avitullamiento. Es el único en toda la carrera donde paro 20 segundos para beber dos vasos de isotónico y varios trozos de membrillo. Empieza un tramo super técnico que nos lleva hasta La Muela. Aquí empieza la segunda parte de mi carrera. Hasta el día de hoy no he entendido lo que querían decir los corredores que decían que iban "enchufados" corriendo. Hoy lo he experimentado. Haciendo cuentas, iniciando este tramo iba en el puesto 22 y he conseguido llegar a meta en el puesto 12. Ha sido una orgía de correr, andar, saltar entre piedras, arrastrar el culo, pasamanos con cuerdas y cadenas, arrancadas trepando por alguna roca, adelantar, tropezar, subir, subir y subir. Me he sentido en todo momento con las pilas a tope, sintiendo como mi cuerpo se autorregulaba yendo de menos a más aunque yo le hubiera demandado lo máximo desde el principio. Me salto el avituallamiento que hay antes de las antenas y cuando corono comienzo una bajada a todo trapo en la que voy pillando a unos cuantos corredores más. No quiero ponerme muy místico, pero han sido muchos kilómetros de sentirme pletórico, feliz, en plena comunión con mi sufrimiento (porque en el fondo iba muy puteado por las adversas condiciones meteorológicas y el frenético ritmo de carrera).






Es increíble llegar a meta con la sensación de que te quedan fuerzas para más y más kilómetros. Creo que lo que he experimentado en esta segunda mitad de la carrera se ha debido a un muy buen entrenamiento (eso va por tí Tere) y a que estoy refinando muy bien mi estrategia de hidratación y alimentación los días y horas previos a carrera (y esto para tí Vanta Nutrition y Juanjo Larrotcha), lo que me ha permitido salir con los depósitos de glucógeno a tope y sin la necesidad de beber en cada avituallamiento. Lo jodido va a ser extrapolar estas estrategias a carreras más largas como la que tengo el sábado que viene: Carrera Sierra de Chiva con 61 km y 3.000 de desnivel positivos. Distancia en la que no me conozco y en la que me esperan de 7 a 8 horas de tajo no remunerado. Pero eso será otra historia. Si sobrevivo para contarlo...jeje






Enhorabuena a la organización y sobre todo a los voluntarios que estaban en los puestos de control soportando frío, viento y lluvia con un par. Como dato anecdótico el chocolate caliente con bollos en meta fue un puntazo. Creo que me zampé 4 raciones.

Una pena el mal tiempo que hizo durante todo el día y que no posibilitó que las familias de los corredores se desplazaran a Cartagena a disfrutar del buen ambiente postcarrera. Eché de menos no tener a Javi y Elena en la meta.

Por otro lado estoy muy contento, ya que se han publicado las clasificaciones finales de la liga regional y he quedado en un meritorio puesto 10. Por descontado que este puesto es un poco fruto de la casualidad, ya que hay multitud de corredores detrás de mí, o que ni si quiera están en la clasificación, que tienen muchísima más calidad que yo pero que no han podido correr las suficientes pruebas en la liga o que simplemente han estado ocupados con proyectos de mayor embergadura. Por otro lado mi club, Senda, ha quedado 2º en la clasificación de la liga por equipos. Intentaremos darle más guerra a los Roller la temporada que viene, aunque con el nivelazo que tienen va a ser muy difícil.

Joder, pues no me quería enrollar pero me ha quedado un buen tocho. ¡Hasta la próxima sufridos lectores!


miércoles, 13 de noviembre de 2013

IV YETI TRAIL 2013



Sin duda alguna la Yeti Trail es la carrera más bonita y completa que se organiza en la Región de Murcia. A lo largo de sus 44 km y 2.600 m de desnivel positivo te permite recorrer las partes más significativas y espectaculares de esta sierra de la Región de Murcia. Como objetivo para esta carrera me he puesto bajar de 5 horas. Teniendo en cuenta que hace dos años hice 6 horas 45 minutos, se presenta como un objetivo ambicioso pero alcanzable.
 
Una vez más no logro hacer un calentamiento en condiciones. Y eso que he sido previsor y he llegado con tiempo a El Berro. Calentamiento de lengua más que de piernas saludando a amigos y conocidos. Un calentamiento en condiciones, desde mi punto de vista, sería de unos 20 minutos de carrera continua suave, unos estiramientos y cinco o seis sprints progresivos. En lugar de ello corro 5 minutos buscando un sitio donde hacer popó y me meto a la cafetería a tomarme un café con los colegas. Y por fin la salida.


De cháchara en la salida


Salida muy relajada encabezada por Alberto Plazas. Así da gusto. Todos juntitos al trote y hablando. Podría ser así toda la carrera y jugárnoslo todo al sprint en el último kilómetro, ¿no?  Pero la tranquilidad dura bien poco cuando 6 o 7 integrantes del Roller Masters avanzan en tromba a coger la cabeza de carrera y animar la fiesta. Joder, parecen el New Team de Oliver Aton, a toda ostia para liarla parda.







Tras un primer repecho que nos obliga a andar se van definiendo las posiciones de carrera. Los 10 o 12 primeros desaparecen y yo me quedo en un segundo grupo perseguidor integrado por  Joaquin Cárceles, José Bermúdez, Calixto y un servidor. A duras penas veo que nos siguen Anto López, Daniel Lax y 3 ó 4 más que no conozco. Vamos por una senda cómoda con una subida muy relajada que permite correr mucho. Decido coger la cabeza del grupo y tirar un poco más fuerte, lo que hace que se descuelgue gente y nos quedemos Calixto, Joaquín Cárceles, José Bermúdez y yo. Un grupo muy majo que va a funcionar durante muchos kilómetros. Llegamos al primer avituallamiento. Recargo bebida con el isotónico que dan y cuando empiezo a beber corriendo me doy cuenta de que tiene demasiada concentración de azúcares y me da calambres en el estómago cada vez que bebo, por lo que desisto de beber isotónico en carrera y opto por tomar sólo agua. Esto, como podréis ver, me pasará factura más tarde. Puestos a hablar de los avituallamientos, eché en falta más variedad en el alimento sólido. Sólo había barritas y plátano creo recordar. Por lo demás un 10 a la organización.





Llegando al primer pico de la carrera veo que se nos está acercando un grupo peligrosamente. Los últimos kilómetros nos hemos puesto de palique y nos hemos relajado. Decido apretar. Joaquín Cárceles se descuelga y empieza la primera bajada importante. Algo técnica al principio voy preocupado porque bajar no se me da demasiado bien y es probable que me adelanten unos cuantos. Decido bajar a tope, arriesgando bastante, lo que contra todo pronóstico me permite alejarme de mis perseguidores. Únicamente nos quedamos Calixto, Fran Fuertes, que ha conseguido enganchar con nosotros y yo.







Subimos por La Carrasca y Fran Fuertes, tras compartir unos kilómetros con Calixto y conmigo se va alejando poco a poco. Con esto ya contaba. Por las pocas ocasiones que he coincidido con Fran en una carrera veo que es un corredor de mucha calidad que va de menos a más. De hecho finalizó en octava posición esta carrera. Siempre salgo más fuerte que él y siempre acaba pasándome a mitad o a los 2/3 de carrera.

Nos quedamos Calixto y yo. Una buena pareja. Veo a Calixto muy fuerte pero me comenta que le está costando comer en los avituallamientos. Llegando a la segunda cota importante de la carrera, Collado Mangueta, veo que Joaquín Cárceles está a 15 ó 20 segundos de nosotros. Aprieto de nuevo en la bajada más peligrosa de la carrera. La Canaleta por el Barranco de El Gallego. De nuevo me sorprendo porque dejo detrás a mis perseguidores y a Calixto que ha empezado a desfallecer debido a sus problemas al comer sólido. ¿Estaré aprendiendo a bajar?  
 
 
Tras una bajada sin contratiempos llego con ritmo alegre a la zona de La Perdiz donde hay un avituallamiento en el que nuestra carrera se une con otra más corta que ha empezado 2 horas más tarde, la mini Yeti Trail. Llevamos unos 30 kilómetros de carrera y justo aquí comienza la subida más bonita y demoledora que nos lleva hasta el Morrón Chico. Miro el cronómetro y van 3 horas de carrera. Según mis cálculos es el tiempo que debía llevar en este punto para tener opciones de bajar de 5 horas en carrera. Empieza la subida y... ¡Mi amigo el pajarón!  Increible y a la vez previsible. Pues habrá que subir como sea. En plan The Walking Dead me arrastro hacia arriba. Voy pensando que en el fondo me lo merezco. He bebido y comido poco. Y encima está haciendo un calor muy salvaje. Ya sólo queda seguir arrastrándome lo más dignamente posible y esperar que mis perseguidores empiecen a adelantarme. Ahora mismo creo que voy en posición 13. Me va a caer la del pulpo. En el primer cortafuegos me adelanta Joaquin Cárceles, que está haciendo un carrerón. Me da ánimos y desaparece.

Llegamos a la famosa Subida del Caracol. Pues en vez de Subida de Caracol la deberían llamar Subida de Javi Guirado el Caracol. He intentado comer y beber bastante pero sigo igual de lamentable. Justo en este momento me adelanta José Bermúdez. Educadamente me da ánimos y se esfuma en un santiamén.
 
 
 
 
 
 
Cuando llego a El Morrón Chico me recompongo un poco y logro correr, no demasiado rápido, hacia abajo. En este momento me adelanta Jesús Molina. Sabiendo que Jesús es otro que va de menos a más y cuanto más larga es una carrera más le beneficia, era más que previsible. No obstante intento recomponerme mentalmente y me marco como objetivo no perder de vista a Jesús ya que pienso que cuando lleguemos a la pista puedo tener posibilidades de enganchar con él. A todo esto adelanto a Antonio Ibarra. Vamos para abajo pero el pobre va andando-trotando. Se le ve muy jodido. Por lo que vi más tarde no fue una excepción y hubo grandes pinchazos de los pro de la Región.

 
Volviendo a mi guerra Jesús va delante de mí en la primera parte de la bajada, algo técnica pero muy corrible. Ambos vamos adelantando corredores de la carrera corta pero Jesús va mejor. Calculo que está corriendo unos 10"/km más rápido que yo. En estas que aparece el que faltaba, el Yeti.

 

Avituallamiento en Collado Blanco. Al fin algo de variedad en el sólido. ¡Membrillo! Me encanta. Y otra vez para abajo. Cogemos una pequeña senda técnica, que a lo largo de un kilómetro y pico nos llevará al enganche con la ansiada pista de Leyva. En esto que sin previo aviso, y debido a la mala hidratación y el calor que está haciendo, me da un pedazo de calambre en el vasto interno de la pierna izquierda. Tranquilo, no pasa nada... Estira un poquico... Me cojo la pierna para estirar el cuádriceps y ¡zas!  calambre en el gemelo.  Pierdo el equilibrio y caigo a plomo al suelo. ¡Me cago en todas las zorras del Kurdistán!  Sé que no voy bajar de las 5h. Que putada los calambres. Me pasan varios de la mini Yeti y lo flipan un poco viéndome retorcerme por los suelos. Se interesan por mi estado y uno de ellos me recomienda ponerme de cuclillas, lo que me viene muy bien.
 

Espero unos tres o cuatro minutos sentado, se me relaja la musculatura y empiezo a correr de nuevo. Engancho la pista y a bajar lo más rápido posible. A ritmos de entre 3'50" y 4'15", que a estas alturas de la carrera y tras el incidente de los calambres no está nada mal. En esto que llegando al Barranco de las Brujas adelanto a Edu Chordá. Otro que lo ha pasado mal hoy. Engancho el barranco y corro todo lo que puedo. Mi objetivo desde que me han dado los calambres es que no me pille nadie y no perder más puestos en la clasificación. Además he adelantado a Chordá, que siempre está entre los 3 o 5 primeros y me da un poco de alas. De repente oigo una locomotora detrás de mí y me pasa Chordá a toda ostia. ¡Qué calidad tiene el tío!


Llegada al pueblo. Voy solo y un poco atolondrado. Entro en meta en 5h04'46". Una vez que entro veo que estaba Elena con mi hijo Javi algo antes de meta, como le pedí, para coger a Javi y entrar con ėl. Como he llegado atontao perdido no he coordinado mentalmente y no lo he hecho. ¡A la próxima lo intentamos de nuevo!  No he bajado de 5h pero estoy muy contento. Un puesto 15 en una carrera de este tipo era impensable para mí hace unos meses. He aprendido muchas cosas en estas cinco horas. He tenido momentos malos pero he sido paciente y he aguantado esperando a que pasen. Sé que en en los próximos meses, donde espero hacer varios ultra trail, esos malos momentos llegarán de nuevo y más intensamente y hay que aprender a convivir con ellos. Me he dado cuenta que de cara a las próximas ultras tengo que protocolizar y mejorar mis pautas de alimentación e hidratación en carrera, de lo contrario pincho seguro.



Ahora a pensar en los dos últimos retos de envergadura antes de hacer un pequeño parón para afrontar descansado 2014. Cartagena Trail y a la semana siguiente mi tantas veces pospuesto debut en un ultra trail de montaña. Será en la Sierra de Chiva, Valencia.

Por cierto, esto del blog es muy duro. Llevo tropecientos días preparando el post sacando huecos por la noche y he publicado esto lo antes que he podido, aunque la carrera queda ya algo lejos. Espero con el tiempo ser más ágil y publicar antes las entradas.

RICOTE TRAIL 2013

...Llevo más de dos horas de carrera. El incesante serpenteo a través de los huertos del pueblo de Ricote me impiden ver lo que tengo delante o detrás por lo que lo único que puedo hacer es correr y correr. Voy a ritmos de 3'40''/km - 3'50''/km. Sin saber a quien persigo y sin saber si me persiguen. Antes de tomar una nueva curva miro hacia atrás sobresaltado por los pasos de algún corredor cercano pero no hay nadie. Me asusto hasta de mi propia sombra pensando que me va a pasar alguien más rápido que yo y me va a relegar de lo que creo va a ser una buenísima posición en la clasificación general. Último apretón y sprint a meta cuesta arriba. Entro a meta y recapitulo. ¡Qué carrerón acabo de hacer!  2h34'. Puesto 10 en la general. Quién me lo iba a decir hace un año...

¡Qué tensión!



 Llevo años con ganas de plasmar mis viviencias deportivas en un blog. La falta de tiempo, mi constancia en la dejadez y cierta insatisfacción con mis resultados deportivos me han hecho posponerlo una y otra vez. Aprovechando la ola de motivación en la que ahora mismo voy montado me he sentado y voy a hacerlo. Así de sencillo. Lo mismo que hice hace un año cuando decidí empezar a entrenar en serio. Disculpad el blog esquelético sobre el que plasmo mis palabras. Sé que he elegido un logo y unos colores patéticos dignos del blog del mismísimo chikilicuatre. Pero es que era ahora o nunca, ya que seguramente mañana habría abandonado la idea. Quizá sea mi primera y última entrada, aunque espero que la ocurrencia de exponerme a la blogsfera me obligue a darle continuidad al proyecto. Con el tiempo intentaré mejorar la estructura del blog.

Primera subida

Volviendo a la carrera qué más decir. La más bonita de la Región de Murcia en esta distancia. 24km y 1600m de desnivel positivo (realmente el desnivel es menor que lo que dice la organización. No llegará a 1.400 m) por una sierra agreste y solitaria en la que acumulo muchas horas de entrenamiento. Tras un buen calentamiento decido aplicar la estrategia que tantos escalabros me ha provocado. Salir a piñón desde el principio. Antes lo pagaba caro y terminaba la carrera a 4 patas. Ahora puedo aguantar con esa intensidad toda la carrera. Salida rápida en la que me coloco entre los 15 primeros pensando que allí puede estar mi posición. Me coloco al lado de mi compañero de club Calixto y voy cómodo. Empieza la primera subida. Meto un pequeño apretón y me dejo a Calixto. A lo lejos veo a Joaquín Cárceles del club Spor-ti. Poco a poco voy recortándole su ventaja. Me pego un rato a su rueda y con otro pequeño cambio de ritmo consigo dejarlo atrás. Viendo como terminó Joaquín en la clasificación creo que no tuvo un buen día. Ha enganchado conmigo un corredor creo que de Cieza que no sé cómo se llama. Vamos a ir juntos muchos kilómetros. Cuando toca subir andando me deja un poco atrás y cuando toca correr lo engancho de nuevo. Coronamos la primera subida en solitario.
 


Empieza la primera bajada, algo técnica pero muy rápida y divertida. El de Cieza empieza a bajar a todo trapo y me quedo más solo que la una. Tengo que mejorar mucho en las bajadas si quiero estar arriba en las clasificaciones. Termino la bajada sorprendido de que no me haya pillado nadie. Toca empezar a subir de nuevo. Subiendo consigo enganchar de nuevo a mi compañero de escapada. Segundo avituallamiento y cresteo "subeybaja" en el que nos alcanzan dos corredores que hace tiempo estaba viendo que nos iban a pillar. Laureano Pérez del Roller Masters y Francisco Fuertes del club de Alhama. Aprieto un poco y consigo alejarme de ellos y empieza la bajada por una rambla bastante rápida. Como no, mi compañero de fuga de Cieza se pone a bajar de nuevo a lo bestia y me quedo atrás. Tras 4 km de rambla empieza la subida más dura de la carrera. La primera parte es por un sendero ancho con pendiente bastante constante que te permite correr bastante bien si estás dispuesto a sufrir un buen rato. Es aquí donde los dos corredores que logré dejar en el cresteo me pillan y se ponen detrás de mi. Pillamos al de Cieza que de repente revienta y se pone a andar. Tras 1 o 2 km Laureano Pérez y Francisco Fuertes me adelantan y se van alejando poco a poco. De repente me llevo la sorpresa del día. Veo a lo lejos a Javi Salar. Hago cálculos y me saca sólo 1'30". Está claro que ha tenido algún problema porque ese no es su sitio. Llegamos a la mitad de la subida donde hay un avituallamiento. En él se encuentran mi entrenadora Teresa Nimes y Juanjo Vera. Da gusto que te den ánimos cuando estás tan puteado. Como y bebo un poco y empiezo la segunda parte de la subida. Ésta ya te obliga a andar en la mayor parte de la ascensión. Adelanto a Javi Salar y adelanto a Laureano que no ha podido aguantar el ritmo y a tenido que aflojar. Mientras la senda sube directa al pico de Los Almeces vamos cruzando la carretera varias veces, ya que ésta sube a modo de zig-zag. Tere y Juanjo suben animando por la carretera y los veo varias veces. ¡Así da gusto! ¡Gracias amigos!  Llegando al pico voy alcanzando a Lahssen Ouhira y empiezo la bajada final a su rueda. La última bajada de esta carrera es un espectáculo para los que nos gusta la montaña, a la par que un suplicio físico para los que, como yo, no bajamos demasiado bien. Bajada muy técnica por un cortafuegos. Voy detrás de Lahssen y es obvio para los dos que estoy bajando más fuerte que él, pero el amigo no se digna a cederme el paso. Ya le vale...  Llega un momento que se cae, por lo que decido parar y esperar que se levante, ya que me sabe mal adelantarlo de esa manera. Pero ni con éstas me deja pasar...  Aprovecho un momento en el que puedo cortar un poco el camino y lo adelanto dejándolo atrás.
Esto está muy empinado




Terminando el cortafuegos miro atrás y voy sólo, por lo que puedo aflojar ya que veo mi posición asegurada. Cuando empiezo a atravesar los huertos previos al pueblo de Ricote caigo en que es posible que Elena y mi hijo Javi estén en la zona de meta. Siempre me ha hecho ilusión poder entrar a meta con Javi en brazos, así que aprieto el ritmo para poder entrar a la zona de meta con margen de tiempo con mis perseguidores y hacerlo tranquilamente. Al final ellos no contaban con que llegaría a meta tan pronto por lo que no estaban atentos. ¡La próxima lo intentamos de nuevo!


Entrada a meta perseguido por la policía
¡Al fin!




Si en septiembre, en la carrera de montaña de El Valle, acabé muy contento, haciendo el puesto 17, pues imaginad en ésta, mucho más dura y con un puesto 10. Y encima delante de corredores de mi club como Javi Salar, Anto, Calixto, Christophe, Jesús Molina, etc, que han sido y son mis ídolos en este mundillo. Sé que muchos no estáis en vuestro mejor momento, ya que es difícil estar siempre allí arriba, pero seguro que pronto volveréis al puesto que os corresponde. Por mi parte soy plenamente consciente que va a ser muy difícil estar de nuevo en el Top 10, pero seguiré entrenando a muerte para ello.
 
Con la élite de Senda
Está muy visto el tema de los agradecimientos, pero no puedo evitar dárselos a Elena y Javi Jr. por soportar tantas horas de entrenamiento a horas tan intempestivas, y a Teresa Nimes, con la que llevo entrenando apenas 2 meses y ha sido capaz de sacarme un rendimiento con el que no podía soñar hace unos meses. 

Y ahora a preparse para la Yeti Trail, carrera con 44,5km de longitud y unos 2.500 m de desnivel positivo. Es el sábado 2 de noviembre, y como referente me he propuesto intentar bajar de las 5 horas. Pero esa será otra historia...